Gafas moradas

Y de repente un día, te das cuenta de que tienes derecho a ir con vestidos o pantalones cortos pese a tus gemelos de Roberto Carlos o las estrías en las rodillas por los problemas de tu rótula. Sí. Va en serio. Me costaba enseñar mis piernas. Y empiezo a intuir que estas mierdas son tan comunes como la sangre azul en los anuncios de compresas.
Gracias, gafas moradas.

Ilustración: Lyona

Deja un comentario